El espacio es un elemento afectivo, simbólico, medio de relación, de comunicación, el cual cobra gran valor según su uso y su vivencia.
El espacio es muy importante, es la materia prima de toda obra de arte y de todo que hacer arquitectónico.
Adaptamos el espacio en forma sensible, para desarrollar más los sentidos, disfrutar de la vida interior, del aire libre, de la protección y conservación.
El espacio no está vacío, por eso tenemos en cuenta la contaminación electromagnética, acústica y ruido.

Nuevas tecnologías, ahorro energético, sostenibilidad y respeto al medio ambiente.
Sistemas de cerramientos, se transforman en elementos controladores, de: seguridad, ruido, iluminación, ventilación y temperatura.
Técnicas y materiales naturales, estudio del espacio, orientación, colores y aromas.
Técnicas decorativas, con elementos naturales: agua, tierra, metal, fuego y madera.
Aplicación del color, según la actividad a desarrollar.
Aplicación de imágenes o gráficos para comunicar o despertar nuestros sentidos.